ADIOS JUAN CARLOS, querido metrónomo.

Juan Carlos Arch

No entiendo, en verdad, por qué mis gurúes han de partir mucho antes de lo previsto... ¡qué egoísmo el mío! Más bien, antes de lo que YO preveo...

Es casi una broma que jamás haya coincidido con él; jamás le conocí en persona. Pero de boca a boca, leyéndolo, comentándolo lo disfruté entre líneas, con mensajes que inyectaban hálito a nuestro movimiento: el cineclubismo global, la libertad del audiovisual para transitar entre nosotros.

Se va antes de que muchos lo terminemos de saborear; se va habiendo inoculado a una generación; se va cuando sabe que el tiempo es preciso, porque su sabia estancia en la tierra indica bien el momento de partida. Así se me van los gurúes.

Juan Carlos. de ti heredamos ahora una gran responsabilidad; nos dejas la energía de nuestra revolución sin armas, una revolución de ideas, luces y sonidos: el ímpetu del cineclubismo global.

Con tu partida hierve la sangre y suena el metrónomo.

TAC - TAC - TAC implacable.
TAC - TAC - TAC... fuiste quijote pero no caudillo.

[FUERZA Cristina... juntos transitaron, ambos quijotes... fuerza.]

Ahora volteo a Brasil donde Claudino, a Cataluña donde Julio y Marti;
repaso los rostros de mis compañeros en América Latina, y recuerdo que
Iberoamérica ya no necesita caudillos...

...LAS NUEVAS REVOLUCIONES NO NECESITAN CAUDILLOS, NECESITAN MARCAPASOS.

NECESITAN METRÓNOMOS que lleven el ritmo del movimiento.

ADIOS Juan Carlos, querido metrónomo... En donde estés, BUONA VISIONE de nuestros pasos y acciones... no te vamos a fallar.

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Comentarios

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Muy bueno. Pero deberian de hacer un reportaje para salir en el portal de noticias de www.yucatanalamano.com que es un portal de noticias para nosotros que nos encontramos en el otro lado de la frontera.

Sumarme al pésame por la partida de Juan Carlos Arch

Estimado José Serralde: Yo conocí a Juan Carlos Arch y recibí los beneficios de su espíritu cooperativo, solidario, empático, sensible. Fuí compañero de estudios de su hijo Lucas y, como soy dibujante, recibí el empuje, el aliento y la ayuda de Juan Carlos al iniciarme en este camino que transito ya como estilo de vida: el de dibujar (retratos, caricaturas, ilustraciones y cuanto el mundo humano me pida que traduzca en líneas, en figuras).
Siento el peso de la partida de un hombre bueno, manso, sensible, artístico, solidario. De esos que se constituyen en faro de los otros, que iluminan calladamente con el ejemplo, con la persistencia en el amor por todas aquellas cosas que dan calidad a la vida humana. Por fortuna, Juan Carlos ha dejado dos hijos que heredaron su antorcha, que protegen el fuego del arte, el cineclub, el amor por la ética, el arte, el afán de construir un humano mundo mejor.
Ramiro Rossi

Te tomo del hombro Ramiro...

Muchas gracias por tus líneas. Celebro que los Arch continúen esta inercia que hoy, nos contagia a todos. Un fuerte abrazo, y me conecto con tu obra. Gracias en verdad.

Cuanto lamento enterarme de

Cuanto lamento enterarme de la muerte de este colega cineclubista, siempre militante del movimiento de cineclubes en Argentina, su país, latinoamérica y el mundo. Siempre hace falta gente como Juan Carlos Arch, siempre hace falta un miembro del cineclubismo mundial. Nuestras condolencias.
Desde el Cine Club Ingeniería Universidad de Carabobo. Venezuela.